Cuando
los niños comienzan a crecer y se vuelven más independientes y autónomos,
también empiezan a pensar que no necesitan guías ni adultos que les digan que
cosas den hacer, así que intentan hacer muchas cosas incluso si eso va en
contra de las normas que se establecen en la casa o el colegio, pues para ellos
no hay nada más importante que lo que ellos quieran hacer.
En
realidad es bueno que los pequeños tengan su independencia y sean autónomos,
sin embargo, también puede convertirse en un problema para nosotros los padres,
pues controlar su comportamiento se vuelve algo realmente difícil.
Poner
reglas en casa cuando un niño cree que no las necesita y que definitivamente no
las quiere aceptar, puede ser una tarea difícil pero que debe lograrse, así que
a continuación te daremos algunos consejos para que puedas poner reglas sin
volverte el malo de la historia.
poner reglas
Antes
de poner reglas
Lo
primero que debes saber es que no hay un hechizo mágico para que todo sea
perfecto, en realidad ninguna estrategia educativa será 100% efectiva pues
todos los niños tienen un carácter y personalidad diferentes así que lo que
funcione para alguno para otros puede que sea un fracaso.
Lo
ideal es intentar varias cosas y que las vayas adaptando según los requerimientos,
la aceptación y la personalidad de tu hijo, siempre partiendo de normas y
principios básicos que permitan tener una buen base educativa.
5 Consejos para poner
reglas y no ser el malo de la historia
1. Coloca limites que sean claros y de
acuerdo con la edad del niño, cuando establezcas los limites debe ser claro y
explicarle el porqué de ese límite, además debes ser específica a la hora de
decirle que hacer, pues no será lo mismo que le digas que se porte bien –que
para él puede significar algo diferente a lo que piensas- que decirle que por
ejemplo no tire sus juguetes.
2. Muchas veces para llamar la atención
los niños hacen pataletas, gritan o se comportan de una forma errónea, pero
ellos deben entender que si se comportan mal no van a recibir la atención que
están buscando pues esa no es la forma correcta de conseguirlo. Así que cuando
haga ese tipo de pataletas lo que debes hacer es retirarte e indicarle que
hablaran cuando se calme.
3. Debes ser muy explicativa a la hora de
poner normas, debes mostrarle que no es un capricho tuyo, sino que las cosas
deben hacerse por una razón, así que explícale por que le pides hacer las cosas
y le impides hacer otras.
4. Dale opciones limitadas, es decir,
colócalo a escoger entre dos cosas por ejemplo, “si estás jugando en la calle
con tus amigos hasta las 7, cuando ingreses no puedes ver televisión, pero si
entras a las seis podrás ver tu programa favorito” con eso disminuyes sus
posibilidades y será más sencillo que haga las cosas de la forma que deseas.
5. Debes ser coherente al poner reglas y
limites que impongas, por ejemplo no le pidas que no grite cuando tú lo haces
todo el tiempo. Debes recordar que los padres somos su mayor fuente de
enseñanza y que ellos imitan nuestro comportamiento.