Autoría: Sara Tarrés
Republicado con autorización de http://www.mamapsicologainfantil.com/
Los celos entre hermanos son universales y naturales, surgen
como respuesta al miedo a perder la atención y/o el
amor de mama o papá que experimenta el niño con la llegada de un nuevo miembro
a la familia (por lo general).
Aunque los padres no podamos evitar que
nuestros hijos sientan celos,
lo que sí que podemos hacer es evitar caer en estos 10 errores que fomentan los celos entre hermanos.
10 errores que fomentan los celos entre
hermanos:
1.
Mostrarnos más
impacientes e intolerantes con las conductas del hijo mayor.
2.
Destacar sus errores, ver todo lo negativo que hace, seguro que a lo largo de día
nuestro hijo mayor hace multitud de cosas bien. Fijémonos en ellas más que en
los errores que puede cometer. es solo un niño y es normal que se equivoque.
3.
Tener altos niveles
de exigencia y expectativas, recordar
que solo es un niño pequeño.
4.
Intervenir en todas las
pequeñas rencillas, peleas o roces que
inevitablemente se producen en la convivencia entre hermanos.
5.
Reñirle constantemente, no es necesario estar siempre encima de él, esto provocará más
frustración y sumará malestar.
6.
No demostrarle lo mucho que le
queremos, por muy enfadados que estemos
en una situación límite, hay que seguir demostrándole que seguimos estando a su
lado, que le queremos y que no perderá nuestro amor. Somos sus padres, siempre
estaremos a su lado y le ayudaremos.
7.
Hablar de él ni de su
comportamiento delante de otras personas,
aunque sea un niño y parezca distraído en otras cosas, él o ella entiende todo
lo que decimos y se siente mal cuando le “criticamos”.
8.
Compararle con otros niños o
con su hermano, aunque pueda parecer inevitable sabemos que las comparaciones
son odiosas y producen un dolor añadido que no lleva a nada. Cada persona es
como es y a pesar que tengamos mucho por aprender cada uno somos quienes somos
con nuestros más y nuestros menos.
9.
Compartir todo con su hermano.
Debemos procurar que cada niño tenga tiempo con mamá y papá a solas, que tengan sus propias cosas, sus gustos y amigos, es decir,
que cada cual tenga su propia vida.
10.
Alabar en exceso los comportamientos, conductas o trabajos del
hermano menor. Muchas veces sin
darnos cuenta nos volcamos en uno de nuestros hijos, por lo general el pequeño y
sobre todo cuando empieza a hacer monerías que atraen toda nuestra atención. Si
bien es cierto que debemos alentar los avances y progresos de nuestros hijos
debemos hacerlo de un modo ecuánime y razonable. Si el niño que siente celos
observa que solo destacamos todo lo bueno y maravilloso que hace su hermano es
posible que se sienta menospreciado y relegado a un segundo plano. Intentemos
destacar todo lo buenos que tienen ambos sin que uno de ellos acabe acaparando
toda nuestra atención.