A menudo muchos padres se
preguntan ¿Por qué yo siempre debo estar con mis hijos cuando usan una Tablet?
De hecho esta pregunta también
suele ser frecuente en niños de más de 8 o 9 años de edad.
Ocurre que tanto niños como
muchos adultos, desconocen las consecuencias de utilizar una Tablet
indebidamente.
El acceso irrestricto a la
información, el tipo de conocimiento (mal conocimiento) adquirido mediante las
redes sociales o en cualquier sitio web puede generar consecuencias drásticas
para la psiquis de los niños.
A lo largo de la historia los
grandes inventos (como la imprenta, el apogeo de la escritura, la radio, la
televisión y hasta internet) han sido recibidos por muchos intelectuales como
una amenaza de cada época. Por tal razón no es de extrañar que la utilización
de las Tablet (sobre todo en niños menores a 5 años) pueda generar algo de
desconfianza por parte de los padres.
Razones por las que debemos estar
con nuestros hijos mientras ellos utilizan una Tablet
“No mami, yo sé lo que hago. No
interfieras en mi Tablet”
Con el auge de las nuevas
tecnologías muchos niños afirman “conocer a la perfección” los sitios que
pueden o no visitar. Sin embargo, la experiencia y conocimientos de los adultos
puede ayudarlos a encauzar esta energía y ansias de conocimiento hacia fines
productivos y positivos.
Problemas de vista a la vista
La Asociación Estadounidense de
Pediatría (AAP) ha tomado las precauciones de la situación invitando a los
padres a que no permitan que sus niños utilicen tal dispositivo por más de dos
horas al día, puesto que, podría dañar la visión de los niños. Por otra parte
desde esta asociación los expertos indican que existirían potenciales
desventajas en cuanto los procesos de aprendizaje y su correcta asimilación.
Consecuencias físicas
Además el tiempo que los niños
invierten (por demás) en la utilización de una Tablet puede desencadenar en
consecuencias negativas físicas (motoras), ya que todo niño que se encuentre
saludable debe realizar el ejercicio físico moderado, situación que cada vez se
genera con menos frecuencia producto del tiempo que los niños dedican a la
utilización del dispositivo electrónico (ya que cada vez resultan ser más
atractivos y completos).
Falta de atención en aumento
No hay que olvidar que el uso de
dichos dispositivos puede desviar la atención del niño. No descartemos que su
cerebro se halle en desarrollo y expansión y que, a menudos, estos dispositivos
facilitan diferentes labores que, en el caso de los más pequeños, impiden la
correcta formación de su cerebro, inhibiendo el desarrollo de las emociones y
fomentando el aislamiento social.
Un peligro del otro lado de la
conexión
Por último diremos que tras las
pantallas de los dispositivos electrónicos se pueden esconder adultos con
buenas intenciones o, también, con miras perversas. Por tanto sugerimos que
siempre, como padres y madres responsables, estemos pendientes de lo que
nuestros hijos hacen con la Tablet. Hay que comprender que las nuevas
tecnologías nos obligan a cuidarlos desde el punto de vista emocional,
intelectual y psíquico pero también desde un aspecto o enfoque virtual.