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Sin duda todo
padre y madre cree que conoce a sus hijos: las madres los han llevado en su
vientre durante 9 meses, los ven crecer día tras día, etc. Sin embargo a menudo
la pregunta ¿conoces realmente a tus hijos? Puede no ser respondida de manera
acertada tanto por los padres como por las madres.
En este
experimento se invitaba tanto a padres y madres como a los propios niños a
realizar un simple test con preguntas de estilo: ¿Cuál es el cuento preferido
de su hijo? o ¿Qué música le gusta?, entre otras tantas.
El formulario de
preguntas, se llevó a cabo en una población de padres y madres de diferentes
nivel socioeconómico y cultural con diversas actividades.
Formulario de
preguntas del experimento
Este es un
simple test que se puede llevar a cabo en cualquier momento y lugar y mide la
comunicación real que existe entre padres e hijos.
- ¿Cuál es el relato, narración o cuento favorito de tu hijo?
- ¿Cuál es su película o serie preferida?
- ¿Cuál es su color preferido?
- ¿Qué es lo que tu hijo más admira en ti?
- ¿Cuál es el nombre del mejor amigo/a de tu hijo?
- Si tu hijo pidiera 3 deseos ¿Qué crees que pediría?
- ¿Qué actividad le gusta más a tu hijo compartir contigo?
- ¿Qué es lo que le produce más felicidad?
- ¿Sabes que quieres ser tu hijo cuando sea grande?
- ¿Cuál es su comida preferida?
- ¿Qué crees que enoja más a tu hijo?
- ¿Qué piensas que lo avergüenza?
- ¿Qué crees que le alegra?
- ¿Qué música prefiere escuchar?
- ¿Quién es el héroe de tu hijo?
- Si tu hijo pudiera ser invisible, ¿Qué crees que haría?
- ¿Cuál ha sido el día (o época) más feliz en la vida de tu hijo?
- ¿Cuál es la actividad que menos le gusta hacer?
Estas preguntas
se formularon tanto a los niños como a sus padres por separado. Es decir que
mientras el niño respondía, sus padres no estaban presentes.
Luego se
verificaron las respuestas de ambos para ver cuánto conocían sus padres
a sus propios hijos. Los resultados fueron sorprendentes…
Tanto los padres
como las madres han respondido correctamente de modo parcial las
respuestas de sus hijos, es decir, que no conocían del todo a sus
propios hijos.
En otros casos
se observó que los padres conocían respuestas anteriores a las actuales. Es
decir: si la pregunta era “¿Cuál es su color favorito?” muchos
padres y madres han respondido en función de los gustos de sus hijos años
atrás, sin percatarse que ellos han cambiado y variado en sus respuestas.
En el
experimento se observó que aquellos padres o madres que trabajan
extensas horas o tenían variadas actividades sin los niños, desconocían casi
por completo a sus propios hijos
(Algo así como
vivir con un extraño).
Estos
resultados muestran la carencia de comunicación que existe actualmente
en las familias, datos alarmantes y preocupantes.
¿Qué se puede
hacer?
Es importante
que como padres nos involucremos en los gustos, actividades y aficiones de
nuestros hijos ya que nuestro tiempo y atención repercutirá en la formación de
su personalidad sólida e íntegra.