Autoría: María Eugenia Daney
Republicado con autorización de: https://www.escuelaenlanube.com
El trastorno de movimientos
estereotípicos es una conducta en la que
las personas que lo padecen, realizan movimientos involuntarios y de
forma repetitiva. Estos movimientos son: mover la cabeza de un lado a otro,
mecer su cuerpo, agitar sus manos o golpearse la cabeza.
Este trastorno se presenta,
estadísticamente, en más cantidad de niños que en niñas. Sin embargo, existen
algunos trastornos cuyo síntoma es, precisamente, los movimientos
estereotipados como puede ser agitar sus manos en un niños con TEA (trastorno
del Espectro Autista) o el síndrome de Rett en las niñas, que produce que
muchas de aquellas niñas que padecen este tipo de conducta, se froten
compulsivamente las manos llegando, incluso, a lastimarse. También estos
movimientos son muy observados en personas con retraso mental leve o moderado.
Se considera trastorno de
movimientos estereotipados a las siguientes conductas:
- Morderse a sí mismo
- Golpearse la cabeza contra algo
- Apretarse las manos y/o agitarlas
- Golpearse el propio cuerpo (auto-agredirse)
- Introducir objetos de manera compulsiva en su boca
- Morderse las uñas (de modo ininterrumpido)
- Mecerse hacia adelante-atrás o de un lado a otro
- Arrancarse el cabello
- Automutilación (se presenta en personas con trastornos psicóticos)
¿A qué
se debe este tipo de trastorno de movimientos estereotipados?
Este trastorno es un síntoma de
otras patologías tales como: autismo, trastorno obsesivo compulsivo (TOC),
síndrome de Rett, síndrome de Asperger entre otros. Este tipo de conductas se
presentan, también entre un 2% y un 3% de niños con retraso mental y en un
25%de adultos también con retraso.
¿Cuál es la diferencia entre un tic y un trastorno de movimiento
estereotípico?
La diferencia radica en que los
tics se presentan de forma menos voluntaria y no son rítmicos. Por el
contrario, los movimientos estereotipados se manifiestan temporalmente, son
rítmicos, impulsivos y parecieran tener un objetivo o propósito al que
dirigirse.
¿Cuándo debería un padre preocuparse por los movimientos estereotípicos
y realizar una consulta con un profesional?
Cuando los niños pasan más de una
hora realizando movimientos de esta índole, es preciso hacer una consulta con
un pediatra. A partir de los 3 años de edad es posible observar conductas de
este tipo aunque muchas veces surgen en la etapa de la adolescencia.
Con frecuencia, si bien este tipo
de movimientos estereotipados no es controlado por quien lo padece, puede
influir el estrés o situaciones de nervios. Esto hace que el niño o adulto,
ante estas situaciones, tenga mayor cantidad de movimientos estereotipados
pudiendo incluso interferir en sus actividades cotidianas.
Movimientos estereotípicos no patológicos
Existen muchos casos en los que
un niño o adulto puede tener comportamientos estereotípicos pero no ser
patológicos. Muchas de estas características no patológicas surgen en momentos
claves del desarrollo: al decir la primera palabra, aprender a andar en
bicicleta, etc. En estos casos, las estereotipias son solo síntomas de ansiedad
que luego desaparecen por la misma madurez, superación y crecimiento del niño.
El problema se presenta si las mismas perduran durante varias semanas/meses. En
estos casos es importante acudir con un profesional.